Es un proceso educativo vinculado estrechamente a la formación integral de niñas, niños, adolescentes y jóvenes que les aporte elementos de esclarecimiento y reflexión para:
a) Favorecer
el desarrollo de actitudes positivas hacia la sexualidad entendida como
elemento inherente al ser humano, fuente de placer y bienestar que contribuye a
la formación y enriquecimiento de la personalidad.
b) Favorecer
las relaciones interpersonales, el encuentro con el otro sexo propiciando
condiciones de respeto, igualdad, superando todo criterio de discriminación de
género.
c) Poder
reconocerse, identificarse y aceptarse como ser sexual y reservado, sin
temores, angustias, ni sentimientos de culpa, si infeliz, consciente,
responsable.
d) Favorecer
la capacidad de amar destacando el valor del componente afectivo para el ser
humano.
e) Propiciar
la vida en pareja u la armonía familiar promoviendo relaciones de igualdad del
hogar.
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